Vivo y en el cielo

El cielo es un lugar extraordinario. Desde que llegamos hemos estado buscando a dos escritores a los que hemos querido entrevistar desde que empezamos nuestras carreras como periodistas, quizás hasta antes de eso. Finalmente, los hemos encontrado aquí, vivos y en el cielo, y nos han otorgado su tiempo para hacerles una breve entrevista a cada uno. 

Mientras que mi compañero entrevistaba  al Sr. Horacio Quiroga, yo tuve el placer de poder entrevistar a unos de los escritores más legendarios que han existido, Julio Cortázar. Nacido en Bruselas en 1914 y muere en 1984 en París, ahora presente en el cielo. 

1. ¿Qué persona te consideras espiritualmente? 

- Yo creo que cada persona tiene una diferente historia que marca su futuro, y en tanto al ámbito espiritual todos nacemos iguales. Yo siempre he creído que lo que nos forma como persona es lo que la vida nos trae. Yo, por ejemplo, me considero una persona cerrada, antes de cualquier amenaza externa que me pueda afectar psicológicamente. Siempre he seguido una simple regla, si no quieres herirte, no te apegues a nada que te haga sentir cualquier tipo de emociones. Desde pequeño aprendí que nada es permanente. Por eso, es que yo me desahogo y apoyo mis sentimientos en mi escritura, porque considero que es lo único que no le van a crecer alas y me dejará solo.

2. ¿Estás satisfecho con todas tus obras? ¿Por qué? 

- Bueno, tomo por mi éxito que por alguna parte del camino hice algo decente, ¿no? Pero como todo verdadero escritor, no no estoy satisfecho con todas mis obras. Siempre que las leo siento la necesidad de añadirle, agregarle y hasta quitarle todo tipo de cosas para que resulte mejor. Ya claramente no puedo hacer nada de eso. Creo que esa es una debilidad que todos los artistas compartimos. 

3. ¿Cuál es tu mejor obra, en tu opinión?

- Me han preguntado eso tantas veces durante mi vida, no te imaginas. Todavía así, no he podido responderla con certeza ni una sola vez. Nunca en mi vida he estado 100% satisfecho con mis obras, ninguna de ellas. Le he aplicado la misma cantidad de pensamiento y esmero a todas. Pero... te podría decir que mi obra "Rayuela" casi alcanza lo que yo considero la perfección.
4. ¿Qué opinas sobre tu vida amorosa?

Ah, estaba esperando que no preguntaras eso. Pues mi vida amorosa fue un tanto complicada, girò alrededor de tres mujeres; todas muy importantes para mi. Aurora, Ugne, y Carol. Las tres de ellas se fueron por causas diferentes. Podría decir que mi vida amorosa se enfocó en la literatura.

5. ¿Por qué algunas obras tuyas se sitúan en dimensiones y espacios diferentes?

Bueno, algunos dicen que lo hago para confundir al lector. En parte es por eso, pero también me parece necesario implantar un nuevo estilo de narración en el cual el lector no solo se sumerja en un espacio o tiempo, sino en varios, y que desarrolle la capacidad de interpretarlos a su manera. Todo se hace con un poco de comprensión y sentido común.

6. ¿Hay algo que siempre quisiste hacer, pero nunca lo lograste?

-La verdad es que esa pregunta es muy difícil. Ahora que lo pienso, no hay nada que de verdad quería hacer mientras estaba vivo que ahora considere de extrema importancia. Podrías decir que cumplí, medianamente, mis expectativas. Eso me pone feliz.

7. Bueno y por último, ¿le desearías tu vida a alguien más?

-Depende en qué ámbito. Como ya dije, en el ámbito amoroso no, pero si me gustaría que otrs personas pudieran tener la experiencia de poseer mis pensamientos e ideas y poder sobrellevarlas, para ver si hacen algo diferente con ellas. Si a eso es a lo que te refieres...

Con eso, se caducó mi tiempo con Cortázar. Nos despedimos y me prometió otro café en uno de estos días.

Después de Cortázar, tuvimos la oportunidad de hablar con Horacio Quiroga (Salto 1878-Buenos Aires 1937) al cual le hicimos las mismas preguntas.

1. ¿Qué persona te consideras espiritualmente? 

- Durante toda mi vida, fui una persona rebelde y eso me trajo muchos problemas. debido a que en mi vida me pasaron acontecimientos muy trágicos y tristes, hicieron que nunca estuviera completamente feliz. Todo esto me llevo a mi horrible muerte y terminar mi vida deseperado.

2. ¿Estás satisfecho con todas tus obras? ¿Por qué? 

- La verdad es que sí. Siento que mis obras me representan y así todo el mundo sabe lo espantosa que fue mi vida. 

3. ¿Cuál es tu mejor obra en tu opinión?

-Nunca lograré decirte eso con certeza, pero debo decir que la recopilación de mis cuentos cortos podría ser de buen entretenimiento para alguien que busca ser atemorizado.

4. ¿Qué opinas sobre tu vida amorosa?

-Opino que, basándose en mi experiencia, el amor debería ser eliminado de la faz de la tierra. El amor ha sido la raíz de todas mis pesadillas y es la causa de mi indebida muerte, ¿qué crees que pienso sobre él? Pero bueno, para responderte tu pregunta, opino que como ser humano me equivoqué, pero, también como ser humano, no me merecía todos esos amores fallidos que ocurrieron en el transcurso de mi vida. ¿Qué te puedo decir? Próxima pregunta.

5. ¿Por qué hacer el género de horror el centro de enfoque en tus historias?

-Claro está para todo el mundo que lee mis obras que mis sentimientos hacia el mundo están siendo reflejados en las historias que yo narro. Me parece que la gente vive sin saber la cruel realidad del mundo natural: la muerte, el rechazo y la traición. Quiero transmitir lo que de verdad está pasando en el mundo. No lo puedo gritar, entonces lo pongo en mis cuentos.

6. ¿Hay algo que quisiste hacer, pero nunca lograste?

-Ser feliz. Creo que esta respuesta no merece explicación, pero cabe destacar que los momentos de pura felicidad en mi vida fueron insignificantes.

7. Y por último, ¿le desearía usted su vida a alguien más?

-No lo sé. Estoy entre dos decisiones: me gustaría que alguien viviera mi vida para que afronte la realidad de lo que es la humanidad; pero tampoco me parece justo que alguien pase por tanto sufirmiento. Ver los terribles sucesos de mi vida repetirse desde acá arriba en el cielo podría posiblemente ser mi peor pesadilla.

Después de esa intensa entrevista con Quiroga, nos despedimos cordialmente y le agradecí por su valioso tiempo.